Cierta mañana Ana comenzó a percatar que para la fecha muchos vecinos se han retrasado con los adornos de navidad; Ana le dice a Andrés, papá y mamá deben tener demasiado trabajo, recuerdas que por estos días solíamos jugar a las escondidas en los espacios vacíos que quedaban en el desván después de bajar todas las cosas de navidad. A lo que Andrés le responde si es verdad, deben ser muchos los niños que tampoco están jugando a las escondidas porque mira, ninguna casa aún tiene luces, por cierto don pepe colocara el santa colgado de la escalera que siempre pone en la parte trasera de la casa, Ana y Andrés eran dos hermanos muy unidos que podían pasar horas y horas hablando o jugando juntos, aun si hubieran pasado toda la mañana en la escuela. A la mañana siguiente Ana y Andrés percatan que la escuela se mostraba colorida con las luces de la navidad, las puertas, los pasillos, los estantes todo estaba especialmente colorido por la navidad, se escuchaba música de navidad que iba desde el tradicional niño lindo, hasta el acostumbrado Jingle Bells, pero lo que más les llamaba la tensión y los emocionaba era el hermoso nacimiento colocado en el salón de usos múltiple, en la hora del recreo se sienten muy felices y contentos; mientras el paso del reloj se hace súper lento, solo quieren llegar a su casa y verla con los adornos de navidad.
Ana recuerda como el año pasado
aquel día que colocaron la navidad su padre paso muchas horas decorando el árbol mientras que su madre retocaba con un pincel las imágenes del nacimiento, la jornada fue extensa hasta que el sueño y agotamiento la venció a ella y a su hermano y sin percatarse sé que daron dormidos en los muebles de la sala, al siguiente día al despertar aun con muchas de las luces de la casa apagadas la sala resplandecía con la luz del nacimiento; mientras que una hermosa estrella les marcaba a los reyes magos el camino que conduce a Belén. Cuando tocaron el timbre de salida Ana y Andrés fueron los primeros
en llegar al transporte, no soportaban
la demora de sus compañeros el reloj una vez más parecía detenerse. Hasta que por fin todo el grupo se completó y el
carro encendió el motor
para disponer
su marcha…
Mama papá! Gritaron ambos desde que se bajaron del transporte hasta que cruzaron la puerta de su
casa, pero al instante esa alegría que
sintieron sin previo aviso al llegar muy temprano a la escuela se vio
opacada y desvanecía, en la casa no se disponía ningún adorno
de navidad, es más, no entendía la razón por la cual su madre
puso esa cara de molestia que suele
poner
cuando alguno de ellos
no cumple con sus deberes ante la pregunta de Andrés “Mami porque no ha llegado la navidad anuestro hogar” pero lo más triste sucedió cuando su madre
con cara de molestia no solo
la que
pone cuando ella y Andrés no cumple
con sus deberes también habría que sumarle la que suele
poner cuando su papi no llega
temprano para cenar y al llegar pasan largo rato encerrados
en la habitación hasta que alguno de los
dos sale azotando la puerta; “Este año no tendremos navidad” vocifero
su madre! Pero
como puede ser que no tendremos navidad fue la expresión
de Ana y Andrés, luego de almorzar Ana y Andrés al terminar sus deberes escolares solos en
la habitación destinada para tal fin, no lograban entender
nada, Andrés le recordaba que últimamente las cosas eran muy confusas, como el día que Luis
uno de sus amigos de la escuela no respondió más el
pase de lista, alguien dijo
que sus padres y él se fueron del país, también
Ana recordó como María de los Ángeles su prima preferida ya no los visito más también les toco
irse a un
lugar muy lejos, un lugar en el que por algo que ella no comprende acá cuando es día allá es de noche, también recordaron que los fines de semanas solían ser
divertidos
cuando se reunían para festejar algún cumpleaños en casa de la Abuela, eso también dejo de suceder!
ellos aún son
muy
pequeños y no logran entender porque muchas cosas son tan diferentes,
Ana y Andrés después de pensar y divagar deciden
hacer algo, ambos se miran y con aquel gesto en sus miradas dicen en
voz
alta “Nosotros salvaremos la navidad”.
A la mañana siguiente en la escuela la alegría del día anterior se ve opacada cada vez que recuerdan las palabras de mama “Este año no tendremos navidad” El día estaba algo húmedo, toda la noche llovió, muchos lugares de la escuela estaban inundados incluyendo su salón, es más pasan un largo pero largo rato en un pequeño espacio del salón que es destinado para guardar los bolso con sus meriendas, esto parecía ser algo como un depositario de morrales, todos absolutamente todos dejaban es este espacio las cosas que no usarían por el resto de la mañana, incluso su maestra Evelin dejaba una hermosa cartera que le había regalado para el día del cumpleaños, era tan grande que hasta su enorme teléfono y maquillaje se guardaba discretamente en esa cartera, hasta que don pedro exclamo con voz potente “Ya el salón está limpio pueden entrar” la mañana trascurrió como todas las demás aunque los niños hoy si querían que se detuviera el reloj como también que sus compañeros se retrasaran para llegar al transporte no quería llegar de nuevo a casa, tendrían que lidiar una vez más sin culpa con aquel rostro característico de su madre, llegada la tarde esta volvió a ser como tantas de aquellas, aunque esta vez la cara de su mami fue más fresca que la del día anterior, claro ellos sabían que todo eso era mientras no hablaran nada sobre la navidad, para la hora de la cena aquella cara hizo de nuevo presencia en el comedor cuando mamá le dio un comunicado a su papá.
Por eso el padre hizo lo posible por salir del trabajo temprano en medio de fuertes complicaciones, ya a punto de salir recibió un texto desde el teléfono fijo de su casa “Ya estoy en casa la reunión se suspendió, mejor no pidas permiso” pensó el padre una vez más solo sirve esa mensajería de texto, debe estar caído la operadora móvil, cuando la madre llega a la escuela y ella se anuncia ante el portero de turno recibe de este una prominente mirada de asombro; 40 min más tarde madre y padre llegan a casa y al abrir la puerta percatan ambos la presencia de las imágenes del nacimiento, Virgen María, san José, la mula y el buey en una mesa en el centro de la sala alumbrados por un cirio de navidad, junto una nota de navidad que decía, sorpresa mamá, papá; en medio de muchas cosas que nosotros no entendemos y que vivimos a diario hoy queremos ayudarles a que vivamos los días más hermoso que suelen existir hasta ahora en nuestra tierna infancia.
La Navidad.
Cuento de Navidad por Jhimmy Ángel
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